Mini-Lifting Facial con Hilos Tensores​​

 

 

Es una alternativa conveniente y segura al lifting facial tradicional. Diseñado para ser mucho menos invasivo, puede reducir la piel fláccida alrededor de los pómulos, la línea de la mandíbula y el cuello de manera más rápida y menos riesgosa que la cirugía convencional. Durante este estiramiento facial se utilizan hilos tensores autosustentables para sostener discretamente en el lugar a la piel y el tejido facial. Se utilizan hilos tensores especiales transparentes para minimizar aún más cualquier rastro del tratamiento. El mini-lifting facial en general no sólo produce resultados notables casi inmediatamente y con menos riesgo e inconvenientes que otros procedimientos más invasivos, sino que sus costos son bastante razonables en comparación con las opciones tradicionales.

 

Está claro que los Hilos Tensores, en sus diferentes tipos y versiones, no necesariamente reemplazan a la cirugía pero si está probado y con miles de pacientes que ya los avalan en todo el mundo, que son una técnica excelente que colabora en la recuperación de la tensión de los tejidos en forma inmediata y a largo plazo. Los hilos están indicados en muchos pacientes como tratamiento de prevención para el avance de la flaccidez por su acción de anclaje que puede retardar hasta en años o desechar finalmente la elección del paciente por un lifting quirúrgico.

 

Los hilos tensores pueden no estar indicados como técnica exclusiva de rejuvenecimiento en aquellos hombres o mujeres con marcados signos de envejecimiento, con excesiva flaccidez en la piel y arrugas, pero igualmente aportan un gran efecto tensor, mejorando el contorno del rostro y realzando pómulos en todas aquellas personas que no desean acceder al quirófano y recurren a técnicas no invasivas para verse y sentirse mejor.

 

¿En qué consiste el tratamiento?​

 

El mini-lifting facial está diseñado para las personas que experimentan los primeros signos de flaccidez facial. Este innovador procedimiento puede realizarse en apenas una o dos horas. Se insertan delgados hilos a través de micro-incisiones de 1mm, las cuales no necesitan sutura, permaneciendo casi imperceptibles inmediatamente después del tratamiento y cierran espontáneamente. Estos hilos se anclan por medio de microespículas a los planos profundos de la piel. Una vez introducidos, mantienen una tracción continua a la vez que se produce una estimulación natural de la estructura del propio tejido, llevando a la formación de nuevas fibras de colágeno y elastina por el propio organismo, las cuales proporcionarán mayor sustentación y un aspecto externo más rejuvenecido.

 

Candidatos para el Mini-Lifting facial con hilos tensores:​

 

Los mejores candidatos están entre los 30 y 50 años y tienen una tonicidad relativamente buena en la piel. La mayoría están comenzando a notar cierto grado de flaccidez en la cara o el cuello pero que aún no requieren un lifting facial tradicional. Si los signos de la edad son relativamente mínimos, un estiramiento con hilos tensores puede ser una buena forma de mejorar la estética a la vez que se evitan las cicatrices de la cirugía convencional y otros posibles efectos secundarios que a veces ocurren después de procedimientos quirúrgicos invasivos.

 

Resultados:​

 

Finalizada la intervención ya se observa un resultado. Los cambios definitivos que tanto el profesional como su paciente esperan se deben valorar en 2 a 3 meses, para que los hilos asienten en el tejido y se acomoden, además de dar tiempo al propio proceso de estimulación y formación del nuevo colágeno, el cual dará la retracción final de la piel.

 

Recomendaciones:​

 

Antibióticos y antiinflamatorios por vía oral. Evitar manipular el área o hacer movimientos faciales bruscos o forzados durante 10 a 15 días.